Pérdida de pelo


Aunque no todos tenemos la suerte de tener una preciosa melena brillante y sedosa, todos valoramos nuestro pelo, y no importa cuánto nos quejemos, estaríamos muy tristes si desapareciese. El pelo juega un papel muy importante en nuestro aspecto y como animales tímidos que somos, es natural que nos importe mucho. La pérdida del cabello puede ser extremadamente preocupante, pero no siempre es necesario que nos alarmemos. De media, hay por lo menos 100.000 pelos en el cuero cabelludo. El pelo crece aproximadamente un centímetro al mes en un ciclo normal. En todo momento, un 90% del pelo de la cabeza crece activamente, mientras que el 10% restante está “descansando”. Este pelo que está “descansando” se caerá de forma natural en tres o cuatro meses y será remplazado por pelo nuevo que crecerá en su lugar. Es completamente natural que cierta cantidad de pelo se caiga de manera regular. No obstante, en algunos casos, hay una tasa anómala de caída del cabello y no crece cabello nuevo suficiente como para remplazar la cantidad perdida. Esto puede provocar una pérdida del cabello o calvicie parcial o total. Médicamente, este trastorno se denomina alopecia, pero también se conoce como calvicie, caída del cabello o pérdida del cabello. La pérdida del cabello puede afectar a hombres, mujeres e incluso a niños. Dependiendo de la causa de la caída, hay distintos tipos de pérdida del cabello del cabello. La alopecia androgenética, calvicie de patrón masculino (hombres) y calvicie de patrón femenino (mujeres) son los tipos más comunes de pérdida del cabello. La alopecia androgenética es un tipo permanente de pérdida del cabello y en gran medida se debe a la genética y a la herencia; la comunidad médica lo considera incurable. Se pueden desarrollar otros tipos de pérdida del cabello temporal como resultado de ciertos medicamentos, enfermedades o incluso estrés. Una vez se ha tratado la causa subyacente, se deja de perder cabello y su crecimiento continua a su tasa normal.

Síntomas de la Pérdida del Cabello

Los hombres que desarrollan la calvicie de patrón masculino o alopecia androgenética padecen los síntomas en forma de entradas a edad muy temprana. Después de las entradas hay una calva en la parte superior de la cabeza que puede aumentar en tamaño o no con la edad. En la calvicie de patrón femenino, la pérdida del cabello es evidente en toda la cabeza y hay una pérdida de volumen general que puede ser muy angustiosa para la mayoría de las mujeres. Algunos tipos de pérdida del cabello se centran en pequeños mechones, mientras que otros afectan a importantes zonas del cuero cabelludo.

Síntomas de la Pérdida del Cabello, Causas, Remedios y Dieta

Causas de la Pérdida del Cabello

Además de la genética y herencia, hay una serie de factores distintos que pueden resultar en la pérdida del cabello, como por ejemplo:

• Cirugía – Unos meses después de someterse a una cirugía importante, puede sufrir una caída repentina del cabello. Esto se debe al estrés y cansancio que sufre el cuerpo tras sufrir una enfermedad/operación y se detendrá de forma natural transcurrido un tiempo.

• Hormonas – Un desequilibrio hormonal puede provocar una pérdida del cabello anómala. Los elevados niveles de andrógenos y estrógenos del cuerpo pueden provocar la pérdida del cabello. Si la tiroides no funciona correctamente, puede provocar una importante caída del cabello. Una glándula tiroidea muy poco o demasiado activa puede provocar esto.

• Embarazo – Unos tres meses después de parir, muchas mujeres sufren una caída repentina del cabello. Esto puede atribuirse una vez más a cambios hormonales. Durante el embarazo el cuerpo produce un exceso de hormonas que aumentan la producción de cabello. Esta es la razón por la que tantas mujeres tienen un pelo mucho más sano durante los meses de gestación. Cuando nace el bebé, la hormonas se vuelven a equilibrar y se perderá algo de cabello durante el proceso.

• Medicación – Algunos medicamentos y fármacos resultan en una pérdida del cabello temporal. Algunos de los medicamentos que provocan esta pérdida del cabello son los anticoagulantes, medicamentos antihipertensivos y fármacos para tratar las cardiopatías, píldoras anticonceptivas, antidepresivos e incluso los suplementos de vitamina A. cuando se remplazan o se dejan de tomar estos medicamentos, el pelo vuelve a su estado normal.

• Enfermedades – La pérdida del cabello puede ser un síntoma de enfermedades tales como la diabetes, anemia o lupus. Si este es el caso, es importante que se identifique la causa de la pérdida del cabello y tratar la enfermedad inmediatamente.

• Quimioterapia – Los tratamientos del cáncer como la quimioterapia provocan una importante pérdida del cabello. Este síntoma no es desconocido,pero el pelo vuelve a crece aproximadamente un año después de abandonar las sesiones.

• Peinados – Hay algunos peinados como las coletas o trenzas apretadas que pueden suponer una gran presión para el cabello y el cuero cabelludo, pueden provocar cicatrices y resultar en pérdida del cabello, conocido como alopecia de tracción. Si la tirantez del cabello se detiene a tiempo, no habrá una cicatriz permanente ni pérdida del cabello. Los tratamientos de peluquería como por ejemplo el acondicionador de aceite caliente también pueden provocar cicatrices en el cuero cabelludo y estropear el pelo si no se hacen bien. Los productos químicos utilizados para rizar o alisar el cabello pueden causar estragos en los ciclos naturales del crecimiento. En estos casos, la caída del cabello se produce como resultado de folículos pilosos inflamados.

• Edad – La mayoría de los hombres y mujeres notan una pérdida gradual del volumen del pelo a medida que envejecen. La gravedad y cantidad de esta pérdida de volumen depende de factores tales como la genética y herencia y no pueden controlarse.

Remedios Caseros y Curas Naturales Para la Pérdida del Cabello, Preguntas y Respuestas

Remedios para Prevenir la Pérdida del Cabello

Si le preocupa su pérdida del cabello, es aconsejable acudir al médico o dermatólogo para llegar a la raíz del problema y discutir los posibles tipos de tratamiento. Si la pérdida del cabello es repentina y extrema sin causa obvia evidente para el médico, es posible que se solicite una biopsia del cuero cabelludo para poder llegar a un diagnóstico adecuado.

Además de los medicamentos, existe una serie de remedios caseros para prevenir la pérdida del cabello que también han demostrado ser beneficiosos. Las hojas de henna hervidas con aceite de mostaza y aplicadas sobre el cabello fino y las zonas calvas o las semillas de fenogreco mezcladas con un poco de agua y aplicadas sobre el cuero cabelludo son remedios caseros naturales para la calvicie. Masajear el cabello diariamente con aceite de cártamo es un gran remedio casero para el crecimiento del cabello. Un masaje de la cabeza y cabello es muy beneficioso para potenciar el crecimiento y notará una mejora en la calidad del cabello si se hace un masaje cada día durante un mes como mínimo. Hacerse masajes con aceite esencial de jojoba, aceite de oliva y aceite de romero son excelentes remedios caseros para detener la caída del cabello. El aceite de semilla de pomelo, aceite de árbol de té, aceite esencial de menta y el aceite esencial de camomila también ayudan a fomentar el crecimiento del cabello. El aceite de lavanda es eficaz como remedio casero para la caída del cabello ya que se cree que aumenta el crecimiento del cabello cuando se rocía y masajea en el cuero cabelludo. Puede dejarse en el cuero cabelludo o aclararlo.

Pérdida del cabello: Remedios Caseros Sugeridos por los Usuarios

Dieta para la Pérdida del Cabello

La pérdida del cabello puede agravarse y aumentar significativamente en caso de carencias nutricionales. Una mala nutrición resulta en tallos de pelo debilitados, mayor rotura del cabello y una mayor cantidad de pérdida del cabello. La desnutrición también afecta al sistema circulatorio y puede provocar un flujo inadecuado de sangre a las células pilosas. Esto a su vez afecta al crecimiento del pelo y aumentar también la cantidad de pérdida del cabello. Estos problemas pueden tratarse con una dieta equilibrada rica en vitaminas y minerales.

La vitamina A es esencial para conseguir unas células pilosas y tejidos sanos y un crecimiento del cabello adecuado. De hecho, la carencia de vitamina A puede provocar caspa y una acumulación de células pilosas muertas sobre el cuero cabelludo. Para alcanzar la dosis diaria de vitamina A (5,000 UI), hay que aumentar el consumo de frutas y verduras rojas, amarillas o naranjas, como por ejemplo, tomates y pimientos. Algunas verduras de hoja verde son también ricas en vitamina A. Además, también hay que incluir a la dieta diaria alimentos como el hígado, huevos, leche fortificada con vitaminas y aceite de pescado.

La vitamina B mejora la circulación sanguínea y la formación de glóbulos rojos. Cuando el oxígeno se transporta de los pulmones al cabello a través de los glóbulos rojos, las células y tejidos del cabello mejoran, previniendo la pérdida del cabello y fomentando su crecimiento. Las mejores fuentes de vitamina B natural son el pollo, pescado, riñón, cerdo, hígado, cereales integrales y legumbres. Además, también se puede añadir a la dieta diaria suplementos de vitamina B6. Otras vitaminas como la vitamina C pueden mejorar el sistema inmunológico y también la salud del cabello.

El ácido fólico también ayuda a tener un pelo sano. Puede obtener la dosis diaria recomendad de ácido fólico añadiendo zumo de naranja, verduras de hoja, remolacha, brócoli, hígado, germen de trigo, y algunos cereales a la dieta.

Sugerencias para detener la Pérdida del Cabello

Algunos consejos simples para el cuidado del cabello pueden ayudarle a mejorar la salud y calidad del cabello, minimizando por tanto los efectos de su pérdida:

• Utilice únicamente productos destinados a su tipo de cabello.

• No utilice champús, acondicionadores ni tintes de baja calidad que contengan químicos agresivos.

• Lávese el pelo con champús y acondicionadores periódicamente, pero no abuse de estos productos ni se lave el pelo en exceso. Recuerde aclararse bien el cabello tras utilizar champús y acondicionadores.

• Nunca se peine el pelo mientras esté mojado.

• Reduzca el uso de secadores, lacas y otros productos agresivos.

• Póngase aceite en el pelo con regularidad, masajeando también el cuero cabelludo.

Referencias

1. Leonard C. Sperling, Evaluation of hair loss, Current Problems in Dermatology, Volume 8, Issue 3, May–June 1996, Pages 99-136, ISSN 1040-0486, 10.1016/S1040-0486(96)80003-2.

2. N. Hunt, S. McHale, Hair Loss Effects and Surgical/Drug Treatments for the Alopecias, Encyclopedia of Body Image and Human Appearance, Academic Press, Oxford, 2012, Pages 482-489, ISBN 9780123849250, 10.1016/B978-0-12-384925-0.00075-4.