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 A todo el mundo le encantan las avellanas. Ya formen parte de un delicioso postre o mezcladas con leche templada y azúcar, una guarnición de avellana puede añadir ese toque extra, añadiendo muchísimo sabor a cualquier plato. De hecho, conforme la atención hacia la salud y el fitness han ido creciendo, el uso de las avellanas se ha vuelto más común. También son populares como aperitivo. A diferencia de los postres llenos de azúcar que acostumbran a ser extremadamente poco saludables, las avellanas son una opción saludable, deliciosa y muy nutritiva. Esa es la razón por la que muchos médicos recomiendan hoy en día el consumo de avellanas a sus pacientes.

Las avellanas son procedentes de la parte sur de Europa, concretamente de Turquía. Estos frutos se encuentran en racimos en el árbol, igual que las uvas crecen en las viñas. Después de madurar, los frutos caen de las ramas y están listos para el consumo. El dulce fruto se utiliza como remedio para muchas enfermedades debido a los nutrientes que contiene.

Información Nutricional

Una de las mayores ventajas de las avellanas es que pueden comerse crudas. Las avellanas crudas son buenas ya que retienen todos los valores y los nutrientes que contienen. Las avellanas son sumamente buenas para la salud ya que son ricas en vitaminas y minerales.

Estos frutos contienen abundantes minerales y presentan una amplia gama como selenio, cobre, zinc, hierro, magnesio, fósforo, calcio, potasio y manganeso. El fruto también contiene vitamina K, que es un componente esencial de la sangre. El ácido ascórbico (vitamina C), el alfa-tocoferol (vitamina E), la filoquinona (vitamina K1), los folatos (vitamina B9), la niacina (vitamina B3) y la tiamina (vitamina B1) son algunas de las otras vitaminas presentes en las avellanas, además de la vitamina K.

Aparte de estas vitaminas y minerales, los aminoácidos, el ácido aspártico, la arginina, el ácido glutámico y la alanita también están presentes en las avellanas. Las avellanas también son fuentes ricas en grasas monoinsaturadas y grasas poliinsaturadas. Además, las avellanas son una buena fuente de fibra dietética.

Beneficios para la Salud

Las avellanas, como muchos otros frutos, tienen más nutrientes de los que se cree. Este pequeño fruto está cargado de vitaminas y minerales que estimulan la buena salud. El uso de estos frutos como remedio natural se ha incrementado ya que se cree que ayudan a prevenir ataques de vértigo e incluso el cáncer. A continuación encontrará una lista de los beneficios para la salud de las avellanas:

• Las avellanas son una buena fuente de grasas poliinsaturadas y grasas monoinsaturadas que protegen el corazón. Esa es la razón por la que muchos médicos recomiendan a pacientes del corazón que incluyan avellanas en su dieta.
• Las avellanas también contienen una gran cantidad de vitamina E. La vitamina E es muy buena para los músculos, especialmente para los músculos del corazón. Incluso actividades físicas sencillas como caminar dependen de la fuerza de los músculos. Si los músculos están en Buena forma, hace que las tareas sencillas sean mucho más fáciles de realizar. Además, la vitamina E también ayuda a mejorar la salud de la piel, el cabello y las uñas. Esa es la razón por la que el aceite de avellana se utiliza como aceite capilar.
• Las avellanas son una fuente rica en fotoquímicos, y contienen quercetina, kaempferol y proantocianidinas. Las proantocianidinas presentes en las avellanas ayudan a aliviar los síntomas de alergia, mejoran la circulación y también benefician al cerebro. Estas sustancias se encuentran en otros alimentos que estimulan la salud como el té verde y el vino tinto.
• Comer avellanas es una buena opción como fuente de proteínas y fibra dietética. Esto se debe a que una taza de avellanas contiene unos 17 gramos de proteínas y 11 gramos de fibra. Los vegetarianos en particular pueden beneficiarse de comer avellanas, lo que les ayudará a obtener sus necesidades diarias de proteínas a través de una fuente no cárnica. Además, como son ricas en fibra, ayudan a calmar los movimientos intestinales y aliviar el estreñimiento.    
• Las avellanas también son una buena fuente de complejo vitamínico B. El complejo vitamínico B es esencial para el cuerpo, ya que su falta puede causar problemas del sistema nervioso, depresión, defectos de nacimiento, y muchas otras enfermedades. Un puñado de avellanas asegurará que su cuerpo obtiene suficiente complejo vitamínico B, especialmente si no come carne ni huevos.
• Estos frutos también son una fuente rica en otros minerales esenciales como el potasio, el magnesio y el calcio. Estos minerales ayudan a regular la circulación sanguínea. La mejora de la circulación sanguínea no solo implica un mejor funcionamiento del cuerpo, si no también que el sistema inmunitario funciona mejor en general, manteniendo la fiebre, los resfriados y las enfermedades cotidianas a raya.
• Para quienes tienen deficiencia de hierro, los médicos recomiendan que incluyan avellanas en su dieta. Esto se debe a que un puñado de avellanas proporciona un tercio de la cantidad diaria de hierro necesaria. El cuerpo necesita el hierro para que la sangre absorba el oxígeno. Cuanto más hierro contenga la sangre, más oxígeno podrá transportar a diferentes partes del cuerpo y usted se sentirá más enérgico y lleno de vida. Consumir avellanas puede prevenir el sentimiento de cansancio y fatiga.
• Se cree que las avellanas tienen el beneficio adicional de eliminar los factores que llevan a desarrollar todo tipo de cánceres. Aunque esto no se ha probado y se está estudiando la relación entre las avellanas y el cáncer, incluir avellanas en su dieta diaria puede ayudar a reducir las probabilidades de contraer cáncer.
• Un beneficio muy importante de las avellanas es que proporcionan muchas calorías en una sola ración. Unos 100 gramos de estos frutos proporcionan más de 600 calorías. Por tanto, tomar como aperitivo un puñado de dichos frutos antes de ir al gimnasio y después de una rutina de ejercicio riguroso garantizará una nutrición previa y posterior al ejercicio saludable.
• Si consideramos el valor nutricional de las avellanas, indudablemente deberían formar parte de su dieta diaria. Incluir una taza de estos frutos como aperitivo o en una receta cada día puede ayudar mucho a garantizar que su cuerpo recibe un buen número de nutrientes de forma diaria. Puede utilizarlas como ingrediente en una ensalada, como guarnición en un postre, o incluso para adornar una amplia variedad de platos.  Sin embargo, como se ha mencionado antes, las avellanas contienen muchas calorías, por lo que si tiene sobrepeso, debería consultar primero con su médico.
  

Referencias:

1. http://thescholarship.ecu.edu/bitstream/handle/10342/3904/London_ecu_0600M_10587.pdf?sequence=1

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